La validación propia no funciona en relación directa a si se tiene o no una pareja. El valor de un individuo es intrínseco a su existencia.
Cuántas veces no hemos escuchado el refrán de la media naranja, que hace referencia a que sin un amor de pareja no podemos estar completxs. Se cree que el amor de pareja se debe de priorizar por encima de todo y que hasta que no lo encontremos no sabremos realmente quiénes somos.
En cambio, tener una pareja es un modo de vivir en cooperación y compañía, pero no me genera valor, yo valgo por el simple hecho de existir. Se tiene una pareja para compartir lo valiosx que eres, no para que eso te haga valer. Debemos asumirnos como completxs desde la individualidad, para que cuando tengamos pareja se puedan construir mejores cosas y no sea una forma de llenar carencias, resolver miedo o inseguridades.
Para poder salir adelante es clave que cada quien se haga responsable de su ser y se haga cargo de su persona, porque sino se está condenadx a siempre buscar una pareja que se haga cargo nosotrxs, sin importar a qué costo. Esto es cuidar que desde nuestra mente no coloquemos nuestro valor en tener una pareja o en manos de alguien más.